El salto...

Cada cierto tiempo, que tomo valor para saltar a un abismo, no siento miedo por la caída, cuando salto me siento observado es como si lo que me ata al suelo al saltar simplemente se va, por un momento me siento desnudo, expuesto sin manera de defenderme.
No es algo que pueda explicar, me gusta caer, no tengo miedo del final pero el hecho de saltar en si mismo es lo que me aterroriza.
Aún así, sigo escalando a la cima no se que me mueve ni me motiva, solo espero siempre encontrar cada que salto ese temor que siento, para mi es una señal de que aún vivo y aunque a veces me detenga, al final de la caída no dejo de pensar en lo maravilloso que es sentir algo y no puedo esperar a saltar de nuevo.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Abandonando

Lo que tengo para dar